
El pueblo de Dios se prepara en estos cuarenta días para la celebración del Misterio Redentor de Cristo, su Pasión, Muerte y Resurrección, fundamento y eje de la vida de fe del cristiano.
En este tiempo litúrgico tan importante de la Iglesia Católica las Imágenes Marianas Titulares de las Hermandades se visten con el tradicional atuendo de Hebrea, cuya sencillez y sobriedad hacen que sea una de las vestimentas más esperadas de todo el año, pues la Imagen se contempla en todo su esplendor, apreciándose mucho más su belleza.
Así el pasado 5 de Febrero de 2013, la Imagen de Nuestra Madre y Señora de la Consolación, Titular de la Hermandad del Santísimo Cristo de San Agustín de Granada, era vestida de Hebrea con su terno morado de terciopelo de seda, color propio de este tiempo litúrgico. Un bello tocado orlaba el rostro de la Madre de Dios, confeccionado a tablas con piel de ángel bordada en oro en tono gris y un extraordinario lamé francés de oro del siglo XIX.
En su pecho una daga de plata, símbolo de la profecía de Simeón, y sobre su cabeza el tradicional aro de estrellas propio de la vestimenta de Hebrea, del taller sevillano de Manuel de los Ríos, del año 1991. La Virgen sostiene en sus manos una corona de espinas traída de Jerusalén por un hermano a la Santísima Virgen. En su mano derecha un hermoso pañuelo de bolillo del siglo XVIII y el barquito de plata de su iconografía, y en su mano izquierda un espléndido rosario de amatistas y plata de ley.
Ciñe su cintura un extraordinario fajín de hebrea confeccionado con brocados y galones del siglo XVIII.
De esta manera se presenta la Reina del Lunes Santo granadino para la Cuaresma de 2013, en una de las vestimentas más esperadas por los hermanos del Sagrado Protector de Granada, junto a la de salida y besamanos.
Que esta Cuaresma sea para todos un verdadero tiempo de encuentro con el Señor, que las prácticas cuaresmales de ayuno, abstinencia, limosna y oración, nos ayuden a encontrarnos con Jesucristo, Señor de nuestra vida. Despojémonos de todo aquello que nos aleja del amor de Dios y caminemos con María al encuentro de Jesús Resucitado, única fuente de libertad y felicidad verdadera. Preparémonos para la celebración del misterio más grande de nuestra fe en el Triduo Pascual, que da sentido a nuestra vida cristiana, y consolemos el dolor de la Madre con nuestras obras de misericordia con los más necesitados, a Ella que es la Consolación de todas nuestras aflicciones y mortificaciones. Que estos días de Triduos, Quinarios, Besapiés, Besamanos... sean el camino de preparación para ese Domingo de luz en el que los cofrades se tiran a las calles de Granada para proclamar con fe viva, desde su antifaz, mantilla, o andar costalero, que es Jesucristo Nuestro Único Salvador, que su amor se ha derramado a todos los hombres por medio de la sangre de su Cruz y que fuera de Él nada somos, porque todo lo que somos y somos capaces de hacer nos ha sido regalado por su gracia salvífica y libertadora.
Madre de Consolación de tus manos quiero caminar en esta cuaresma al encuentro de Jesucristo Resucitado. Guía mis pasos y dame la fuerza para que con mi testimonio comprometido ayude a que los hombres de nuestro tiempo crean en Él y le reconozcan como su Salvador, Él que es el camino, la verdad y la vida. Aparta de nosotros el mal que nos rodea y que enmascara el verdadero sentido cristiano y cofrade de las Hermandades de Granada, para que las estaciones de penitencia de este año sea ejemplo de la vida interna de fe que vivimos todo el año, y no se queden en lo meramente estético y cultural.
Que caminemos hacia la Santa Iglesia Catedral meditando y contemplando los misterios de la Redención de tu Hijo y que encontremos en esa Cruz de plata la salvación y el amor del que muriendo por nosotros nos ha dado nueva vida.
Reportaje fotográfico de Carolina Fernández Herrera
Exquisita la Reina del Santo Ángel... Mi enhorabuena
ResponderEliminar