Los primeros registros históricos de los que se tiene constancia de esta imagen datan de 1770, lo que la acerca a Ruiz del Peral. Lo cierto es que, independientemente de la mano del artista, es uno de los exponentes más bellos de toda la Escuela granadina, siendo también una de las Dolorosas más bellas de Granada y de toda Andalucía. Su elegancia y su finura, su pálida policromía rosada, y su mirada ensimismada hacen de esta Dolorosa, una de las imágenes con más devoción de toda la Semana Santa granadina, devoción que esperamos se vea pronto reconocida con la Coronación Canónica de La que es sin duda el centro de la devoción de su Parroquia de San Juan de Letrán y de los populares barrios granadinos de Los Pajaritos y San Lázaro.
Sobre su cabeza portaba la hermosa corona de plata sobredorada donada a la Virgen por el cuerpo de costaleros de la Hermandad en el cincuentenario de la Cofradía. En su mano derecha la Virgen sostenía un antiguo rosario de nácar y plata donado por una feligresa de San Juan de Letrán a su Patrona y una hermosa rosa en plata de ley, símbolo del mes de las flores.
Su mano izquierda era ofrecida a la veneración de los fieles con un rosario de oro en su manga. Exornada con la gran cantidad de joyas antiguas de gran valor que posee esta imagen, fruto de la inmensa devoción que atesora la Reina del Amor y del Trabajo en sus barrios, entre las que cabe destacar el Ave Fénix que su barrio donó a la Virgen, por ser su Excelsa Patrona y Protectora, y la cruz de aguamarinas que portaba en su pecho sostenida por una lazada en oro y brillantes.
Es de destacar la gran cantidad de flores y exvotos que cada día se depositan a los pies de la Señora por miles de granadinos que recurren a la Virgen a pedir sus favores, algunos buscando trabajo y otros muchos buscando amor y salud en La que no sólo es Madre de Dios, sino también Nuestra Madre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario